viernes, 1 de abril de 2011

MARÍA ROSA MÍSTICA

  

Acá te muestro también una imagen de yeso betalfa (yeso cerámico) que fué pintada íntegramente con pigmentos naturales. Los pasos que se siguieron fueron los siguientes:

1) Se pusieron los ojos en la estatua (ver San Francisco Javier en donde explico el proceso) y se taparon todos los cortes hechos con enduído plástico. Se pintó la base de color marrón imitando madera.
2) Muy buen lijado con lijas de 3 granos diferentes. Te recuerdo que siempre se lija con la más gruesa, luego se pasa a mediana y por último la más suave.
3) Dos manos de goma laca incolora para sellar poros y adherir pequeñas partículas sueltas.
4) Se pinta con goma laca y pigmentos naturales, 4 a 5 manos por cada color. Esta es muy sencilla porque predomina el blanco, pero te recuerdo que algunos colores se forman por la superposición de capas. Por eso hay que pensar muy bien antes de pintar.
5) Para darle una terminación más fina, entre capa y capa de pigmento una suave lijada fina.
6) Se barniza o no, eso queda a criterio de cada uno y en este caso se le puso una aureola de bronce lisa.

  

Te cuento un poco sobre esta aparición Mariana:

La Virgen María se aparece a una humilde enfermera llamada Pierina Gilli. Ella quiso consagrarse al Señor como hermana de la orden de las Siervas de la Caridad, sin poder lograrlo debido a los problemas que afectaban su salud: el Plan de Dios para Pierina indicaba que su vida debía ser la de un instrumento que recibiría a la Madre del Salvador.


Sin embargo, con anterioridad a María, Pierina recibió las apariciones de una Santa mujer, la fundadora de la orden a la que ella quiso ingresar, Santa María Crucificada de la Rosa. Ella preparó la venida de la Virgen: María finalmente se presentó durante 1944 en una primera oportunidad, mostrando tres espadas que atravesaban su Corazón.

 Las espadas representaban las heridas producidas por las faltas de las almas consagradas, sacerdotes y religiosas. Este mensaje indicó a las claras el sentido de toda la revelación que María nos iba a entregar a través de la humilde enfermera de Brescia.

Pero fue en la primavera italiana de 1947 en que la Virgen acentuó su presencia ante Pierina: allí se manifiesta con la conocida imagen de las Tres Rosas engarzadas en su pecho, y una actitud que de tan amorosa llena de amor a los corazones más fríos y alejados. María Rosa Mística es el nombre con el que la Virgen se manifiesta a Pierina, para alegría de quienes vemos en la Madre de Dios a nuestra guía y capitana:
¡Ella nos lleva a su Hijo, Jesús!

Los mensajes de la Virgen se centran a partir de entonces en la necesidad de ayudar a las almas consagradas, religiosas y sacerdotes, mediante la oración, el sacrificio y la penitencia, siendo estos los mensajes representados en las tres Rosas que María lleva en su imagen. El propósito de ésta misión es claro: Dios necesita a los que integran Su Cuerpo Místico con la función de ser pastores de las almas, y también a quienes con su oración sostienen espiritualmente a la Iglesia. El mundo no puede salvarse, si la iglesia no tiene en su interior a las fieles almas consagradas que muevan a los hombres a la conversión verdadera. ¡Ellos son las venas por los que corre la Sangre espiritual del Cuerpo Místico!

Pero sin dudas que la conocida imagen de la Rosa Mística ha sido el signo que ha caracterizado a ésta aparición: las miles de estatuas que inundaron el mundo han generado cientos de milagros, en la forma de lacrimaciones, lacrimaciones de Sangre, escarchas de colores, exudación de aceite perfumado y sanaciones de cuerpos y almas.

Todas estas Gracias han tenido un efecto maravilloso: la Rosa Mística se transforma rápidamente en una de las imágenes de María más difundidas en el mundo actual. La Reina del Cielo nos enamora profundamente, nos lleva a Su Corazón Inmaculado con la seguridad de quienes saben que tienen la protección de Dios.
¡María Rosa Mística, llena nuestro corazón de tu Gracia, mueve nuestras almas con suavidad y ternura, como lo hacías con tu Niño en Nazaret!

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Hola yo también me dedico a reparar imagenes religiosas, algunas me han costado bastante y otras menos trabajo, ahora lo que si aún no encuentro la forma de que no me queden las líneas de las reparaciones, por ejemplo cuando pegas una cabeza rota casi apenas puedo disimular la reparación, me gustaría que me orientes sobre el tema. te felicito por lo que haces.

Daniel Atapuerca dijo...

Hola y gracias por escribir. Lo que hago es pegar la parte rota y luego lijar y pasar enduído, tantas veces como haga falta. Suelo usar lijas de 2 granos diferentes, por último pinto. Esta es la única manera de evitar que se vea la línea por donde fue pegada la pieza. Espero te sirva. Un cordial saludo.