Con
mi hermana menor nos debíamos una visita juntos a Asís y lo tan esperado y
deseado, se hizo realidad. Fueron días de mucha paz, serenidad, oración y
compartir lo cotidiano, cosa que hacía más de 30 años que no hacíamos. “Il
poverello” nos unió mucho más de lo que estamos unidos y nos enseño mucho más
de lo que pensábamos. Es por eso que lo compartimos con todos ustedes.
Asís
(Assisi) es una pequeña ciudad ubicada en la región de la Umbria, en la
provincia de Perugia, en el centro de Italia, más o menos; mundialmente
conocida porque aquí nacieron, vivieron y murieron San Francisco y Santa Clara:
por eso, los excepcionales acontecimientos de sus vidas, y la difusión de las
enseñanzas franciscanas, constituyen el rasgo más particular de la ciudad, que
ha llegado a ser nombrada centro de espiritualidad y de la paz.
En
la parte nueva de la ciudad, se encuentra la Basílica de Santa María de los
Ángeles (construída en el siglo XVI) en cuyo interior se encuentra “la porciúncula”,
que fue la primera iglesia que arregló San Francisco con sus propias manos y la
ayuda de sus seguidores, es el comienzo de la Orden franciscana, que
posteriormente se desparramará por todo el mundo. Es un lugar de PAZ.
En
la parte superior de la ciudad hay dos grandes basílicas: la de San Francisco,
la de Santa Clara (ambas del siglo XIII) y la Catedral.
La
basílica de San Francisco
La
basílica la construyeron por fuera de las murallas de la ciudad en el año 1228,
2 años después de la muerte del santo a los 44 años, y fue terminada en 1253.
Es muy particular porque está formada por 2 iglesias, una arriba de la otra, en
la cumbre de una roca: es un grandioso monumento concebido como exaltación de
la figura de San Francisco y de su espiritualidad.
La
iglesia inferior es bastante baja y con poca luz, pero muy bien decorada.
En
esta parte se encuentra el sepulcro de San Francisco, un lugar de paz y
oración, es muy difícil describir lo que se siente.
Hay también un museo donde
se exhiben pertenencias del santo, incluyendo su típico hábito franciscano.
Se
encuentran varias obras interesantes de Giotto, Cimabue, Lorenzetti y Simone
Martini, entre otros.
La
iglesia superior es más elevada y luminosa; se entra a través del claustro del
convento.
La fachada exterior sigue el estilo gótico de la región y es sencilla;
destaca en el centro el elegante rosetón.
Pero es el interior de la iglesia lo
que más impresiona, siendo uno de los más importantes testigos del arte
italiana del siglo XIII- XIV, con el crucifijo de madera de Cimabue pero sobre
todo con el ciclo de frescos de Giotto sobre la vida de San Francisco.
La
iglesia de Santa Clara
Construida
entre el 1257 y el 1265, conserva los restos de Santa Clara; se ubica en el
centro de la ciudad, dentro de las murallas. Es una iglesia simple y hermosa,
en su fachada se puede observar los distintos colores de las piedras que la
forman (blanca y rosa) y se destaca el rosetón central. En su interior se
conserva el crucifijo que según la tradición habló a San Francisco en su
proceso de conversión. En la cripta se encuentra la tumba de Santa Clara.
La
catedral de Asís (el
Duomo) está dedicada a San Ruffino. A su interior se conserva la pila bautismal
donde fueron bautizados San Francisco y Santa Clara.
Asís
y la totalidad de su territorio ha sido incluida en la lista del Patrimonio
Mundial de la Humanidad. Para la Unesco, constituye un ejemplo único de
continuidad histórica, de una ciudad santuario, desde sus orígenes
umbro-toscanos y medievales, hasta ahora.
El
comité del Patrimonio Mundial ha incluido también la Basílica y otros lugares
franciscanos en su lista porque representan un conjunto de obras maestras del
genio creativo humano y una referencia fundamental para la historia del arte en
Europa y en el mundo.
Paz y Bien para todos.
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